El ex oficial de inteligencia de la CIA y del ejército estadounidense, Philip Giraldi, dice que Estados Unidos reduciría o eliminaría gradualmente su apoyo a algunos grupos rebeldes en Siria que habían demostrado ser inútiles desde el punto de vista militar, pero que aún mantendrían una importante presencia militar en el país.
Estados Unidos retendrá sus bases militares y su presencia en Siria y continuará respaldando militarmente a las fuerzas kurdas allí a pesar de decir que terminará con su respaldo a los grupos rebeldes, dijo a Sputnik el ex agente de inteligencia de la CIA y del ejército estadounidense Philip Giraldi.
"La presencia de Estados Unidos en Siria no va a desaparecer", dijo Giraldi el martes. "Los turcos afirman que ahora hay 13 bases estadounidenses en el país, algunas de las cuales parecen ser permanentes".
Estados Unidos está en condiciones de dejar de brindar apoyo militar a los grupos de oposición en Siria, ya que el grupo terrorista Daesh está siendo aplastado en el país, dijo la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders, durante una conferencia de prensa el lunes.
Sin embargo, Giraldi advirtió que el gobierno de los EE. UU. estaba decidido a mantener una presencia militar significativa en Siria para garantizar su influencia en las negociaciones que terminarían con la guerra civil de seis años, que costó unas 600,000 vidas.
"Washington se mantendrá así que estará presente en cualquier negociación que tenga lugar para poner fin a la guerra civil", dijo.
Estados Unidos reduciría o eliminaría progresivamente su apoyo a algunos grupos rebeldes que habían demostrado ser inútiles desde el punto de vista militar y que no habían logrado obtener ningún apoyo público popular, reconoció Giraldi.
Sin embargo, la medida se tomó principalmente en respuesta a la enfadada presión de Turquía, un aliado clave de Estados Unidos en la OTAN, que tiene una minoría kurda masiva de entre 13 y 15 millones de personas, o 15 a 20 por ciento de la población total, señaló Giraldi, señaló.
"Ellos [Estados Unidos] son en parte serios, pero en gran medida es una respuesta a la presión turca para dejar de armar a las milicias kurdas que conforman la mayor parte de las fuerzas estadounidenses apoyadas en Siria", dijo.
Washington estaba decidido a no abandonar a los kurdos, que cuentan con un fuerte apoyo en el Congreso y en los medios de comunicación de los Estados Unidos, observó Giraldi.
"Buscarán encontrar otras formas de continuar armando y financiando a los kurdos sin volver locos a los turcos", dijo.
Los kurdos se han sentido cada vez más aislados desde que el gobierno central de Iraq lanzó un ataque militar contra el Kurdistán iraquí a través de la frontera con Siria después de que su líder Masoud Barzani realizara un referéndum en el que el 90 por ciento de los votantes pidieron la independencia total de Bagdad.
Abdulaziz Yunus, que dirige asuntos exteriores para las Fuerzas Democráticas Sirias, ha revelado a Sputnik que Estados Unidos y la coalición nunca han detenido el suministro de armas, a pesar de informes anteriores de que el presidente Donald Trump prometió al presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, terminar con las entregas a los kurdos sirios.
Yunus además especificó que Washington ha enviado cientos de camiones cargados con armamento desde Qamishli, una ciudad en el noreste de Siria en la frontera con Turquía, a Deir ez-Zor, donde el SDF está lanzando una operación militar contra Daesh.
Sputnik
José Cevallos, editor de noticias en español de:
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